lunes, 15 de febrero de 2010

SOBRE LA AUTOESTIMA


Cuando una persona tiene la autoestima alta es difícil que le hagan quedarse en el suelo abatido luego de una caída, porque esa persona cree en sí misma, en sus capacidades, en sus virtudes.
Pero está lleno de personas que no se creen capaces de enfrentar ciertos retos hasta tanto alguien desde fuera no logre convencerlo de que sí es capaz y le demuestre que cree y confía en él.
Y este es el lugar desde donde debe partir el buen maestro para ayudar a su discípulo a tomar las riendas de sus aprendizajes, el timón o los remos de sus vidas.
Creo que todos alguna vez en la vida hemos mirado algún desafío con temor, y si lo hemos podido enfrentar y superar ha sido en parte fruto de nuestro esfuerzo, tesón y optimismo, pero si buscamos mejor descubriremos que siempre alguien de nuestro entorno nos ha influenciado de manera positiva.
Lo he vivido y experimentado. Lo he visto en las personas que me rodean, con quienes comparto mi vida.
Me he esforzado por alentar a mis hijos en muchas ocasiones.
Lo he observado con frecuencia entre mis alumnos.
Unas pocas palabras suelen ser el remedio. Hay que saber encontrarlas, hay que "dar en la tecla". En ocasiones ni cuenta nos damos.
De allí mi gran deuda con mis padres.
Y de allí también mi admiración, respeto y cariño hacia algunos maestros que la vida me deparó.

1 comentario:

Carmen María dijo...

Hola Nancy, me identifico totalmente con lo que escribes, he sido docente poco tiempo (ocho años) y creo que es una labor muy confrontante, reforzar la autoestima en l@s alumn@s requiere que uno mismo revise qué tal anda en ese aspecto. Por lo tanto, los alumnos nos enseñan más de nosotras mismas de lo que un principio pudiera pensarse. Una abrazo desde Yucatán. Y que sigamos mucho tiempo en contacto.